El Buen Fin 2024: Compra inteligente y evita caer en discrepancia fiscal

El término Black Friday tiene sus raíces en Estados Unidos entre los años 50 y 60. En sus inicios, fue utilizado por la policía de Filadelfia para describir las dificultades logísticas y el caos generado por la llegada masiva de compradores a las tiendas, lo que derivaba en un incremento notable del tráfico vehicular y peatonal, además de numerosos incidentes. Otra explicación interesante proviene del ámbito contable: para muchos negocios, esta fecha marcaba un cambio de “números rojos” (indicativos de pérdidas) a “números negros” (representativos de ganancias), debido al aumento drástico de las ventas en esta temporada.

Con el paso del tiempo, el Black Friday se transformó en una tradición comercial que señala oficialmente el inicio de las compras navideñas. En la era digital, su influencia ha crecido exponencialmente, trascendiendo las fronteras de Estados Unidos para conquistar mercados internacionales, tanto en tiendas físicas como en plataformas de comercio electrónico.

En México, El Buen Fin surgió en 2011 como una respuesta local al éxito del Black Friday. Este programa fue desarrollado como un esfuerzo colaborativo entre el sector privado y el gobierno, con el objetivo de incentivar el consumo y estimular la economía nacional. A diferencia del Black Friday, que se celebra el día después de Thanksgiving, El Buen Fin generalmente ocurre una semana antes, consolidándose como uno de los eventos más significativos para los consumidores mexicanos. Este 2024, El Buen Fin se lleva a cabo del 15 al 18 de noviembre.

El Buen Fin tiene características únicas que lo diferencian del Black Friday, destacando la participación activa del gobierno a través del Servicio de Administración Tributaria (SAT) y su fundamento legal en el artículo 33-B del Código Fiscal de la Federación. Como parte de esta iniciativa, el SAT fomenta la formalidad fiscal y el uso de pagos electrónicos, además de realizar sorteos para incentivar la participación. Los consumidores que realicen compras iguales o superiores a $250 pesos con tarjetas de crédito o débito emitidas en México en comercios registrados podrán participar automáticamente.

Al efecto, el sorteo será realizado el 13 de diciembre de 2024, y los ganadores serán anunciados el 16 de diciembre de 2024 por medio del listado de ganadores publicado en el minisitio electrónico del Sorteo El Buen Fin 2024, que estará localizado en las páginas de internet gob.mx/Sorteoelbuenfin y sat.gob.mx. Los premios se depositarán directamente en las cuentas bancarias de los tarjetahabientes seleccionados.

Aunque eventos como El Buen Fin promueven la economía y ofrecen grandes beneficios a los consumidores, es fundamental actuar con responsabilidad y tomar en cuenta los posibles riesgos fiscales. Por ejemplo, el uso adecuado de tarjetas de crédito, evitando prácticas comunes como el prestar las tarjetas a terceros y asegurándose de que las compras realizadas coincidan con los ingresos reportados, son medidas esenciales para evitar discrepancias fiscales. Esto es así porque la Ley del Impuesto sobre la Renta señala como origen de posibles discrepancias, entre otras, las erogaciones realizadas a través de tarjetas de crédito.

Por lo tanto, es crucial que los consumidores sean cuidadosos y mantengan congruencia entre sus gastos y los ingresos reportados, especialmente durante eventos comerciales de alto consumo como El Buen Fin.

Por otra parte, a pesar del éxito de El Buen Fin, el evento no está exento de críticas. Entre ellas se encuentran algunas prácticas de reetiquetado de precios, es decir, el incremento de precios antes del evento para después anunciar “descuentos” que en realidad devuelven los productos a su precio original. Este tipo de estrategias ha generado desconfianza en algunos consumidores, aunque una gran parte sigue participando activamente, aprovechando descuentos auténticos.

Para maximizar los beneficios de El Buen Fin y evitar problemas, los consumidores pueden seguir diversas recomendaciones como las siguientes:

• Realizar un seguimiento de los precios de los productos que se planea comprar antes del evento para confirmar que las ofertas sean reales.
• Evitar compras impulsivas, enfocándose en la adquisición primordialmente de artículos realmente necesarios.
• Usar las tarjetas de manera personal, para evitar problemas con el SAT por posibles temas de discrepancia fiscal.

Siguiendo algunas medidas y consejos como los mencionados, los consumidores pueden aprovechar al máximo estos eventos y disfrutar de una experiencia de compra segura y satisfactoria.

L.D., M.D.F., C.P.C. y P.C.Fi. Rodolfo Jerónimo Pérez

Integrante de la Comisión Técnica Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México

Suscríbete a El Fiscoanalista (novedades y jurisprudencias en materia fiscal y laboral) y a nuestro canal de YouTube.